Este libro es el resultado de una investigación colectiva, hecha desde varias disciplinas, sobre los múltiples sentidos en que se hace la experiencia de ser extranjeros. Antropólogos, artistas, historiadores y críticos de arte y literatura, sociólogos y especialistas en comunicación, que han trabajado en fronteras geográficas y sobre la interculturalidad, analizando otros modos de restringir el tránsito de lo propio a lo diferente, o a la inversa; por ejemplo, pasar de lo analógico a lo digital, o de la ciudad letrada al mundo de las pantallas, las computadoras, los celulares y los iPhones, en el que los jóvenes son nativos y los demás deben aprender un lenguaje que nunca hablarán bien