Espacios naturales protegidos amenazados por la desertificación, especies en estado de extinción, migrantes que malviven en las fronteras, vidas olvidadas en residencias de ancianos, hospitales, vertederos, ruinas urbanas, barrios degradados, parques naturales, poblados chabolistas y zonas contaminadas, comunidades obreras en crisis, ex ciudadanos que nos traen sin cuidado, gentes a las que los grandes números no ven, que no cuentan, pobres cada vez más cerca de la línea de no retorno, enfermos olvidados, paisajes naturales devastados… Todo eso, y más, es abandono, algo que ha alcanzado el rango de los fenómenos estructurales, esos que definen vidas, experiencias, ecologías, contextos y épocas. El abandono, pensado como un diagnóstico general y no solo como un momento, o una coyuntura, es uno de esos conceptos poderosos. Si lo tomamos en serio sirve para pensar el estado de todo lo que existe desprovisto de cuidado y protección. Ahora, ¿se puede contar de cualquier manera, se puede contar como siempre? Este libro encara la respuesta a estas preguntas a partir del trabajo en varios encuentros y diálogos sostenidos a lo largo del tiempo entre un buen grupo de personas, de perfiles variados, de oficios distintos, de regiones distantes.